Sabemos que el lenguaje es muy importante para expresar ideas y comunicarnos ante los demás, pero hacerlo de una forma correcta, en la que puedas distinguirte ante el resto marcará la diferencia a la hora de establecer lazos y generar conexiones únicas con otras personas. Sí eres consciente de que el lenguaje es importante para avanzar en la vida, también entenderás los beneficios que conseguimos a la hora de mejorar nuestra forma de hablar, y de expresarnos de una forma cautivadora con el sello de nuestra autenticidad. En este sentido, los beneficios de mejorar nuestra calidad de lenguaje abarcan casi todas las áreas de la vida, ya sea en el trabajo, con la familia o al conocer a alguien interesante con quien desees entablar una conversación enriquecedora sobre temas trascendentales.
Mejoremos nuestra forma de comunicarnos
¿Cómo podemos trabajar para mejorar o adquirir esa habilidad? básicamente, tenemos que empezar por un principio muy básico que es el hábito de la lectura para mejorar nuestro léxico, y vocabulario al momento de entablar una conversación con una persona que a lo mejor tiene un bagaje de vocabulario muy alto en el que menciona conceptos o palabras para contextualizar un tema. Y en ese contexto, si tu estas en ese tipo de conversación y más o menos tienes un conocimiento sobre significados de algunas palabras, podrás entender de mejor manera la temática que puede abordar la otra persona (siempre cuando sea el caso en el que nos encontremos con una persona que emplea un tipo de lenguaje más académico-formal, o en general en situaciones en las que puedas estar preparado para dar a conocer tu bagaje cultural), ya que, por así decirlo, entrarás en un ritmo de entendimiento mutuo que permitirá una comunicación más fluida entre pares de igual conocimiento y de forma de expresión distintas.
Quizás el ejemplo anterior sea muy específico, pero créeme, puede marcar la diferencia al entablar una conversación en diversas circunstancias, ya que nunca sabemos lo que podemos descubrir en la persona que tenemos enfrente.
Otra forma de mejorar nuestro lenguaje o vocabulario es hablar en voz alta, imaginando una situación en la que conversamos con alguien o en grupo. En ese ejercicio, puedes usar tanto palabras de uso cotidiano como aquellas que no empleas con frecuencia en una conversación común. Imagina una conversación en la que hablas sobre tus pasiones, sueños o metas de vida; la persona que te escucha seguramente admirará no solo los objetivos que quieres alcanzar, sino también la manera en que transmites tu pasión o anhelo. Además del lenguaje, la expresión facial y los gestos también son claves para cautivar a los demás. Por lo tanto, debemos trabajar en estos tres aspectos de forma conjunta si queremos ampliar nuestros recursos comunicativos.
Otro tip para mejorar nuestro lenguaje seria tomar un curso de oratoria en la que puedan enseñarte reglas básicas para comunicarte y desenvolverte de una mejor manera ante de los demás.
Otro consejo para mejorar nuestro lenguaje sería tomar un curso de oratoria, donde puedas aprender reglas básicas para comunicarte y desenvolverte con mayor soltura. Plataformas como Udemy o Platzi ofrecen cursos de oratoria, y también hay creadores de contenido en YouTube que abordan estos temas y ofrecen cursos personalizados. Solo debes buscar la opción que mejor se adapte a ti.
Finalmente, para los más atrevidos, una opción sería abrir un canal de YouTube y hablar sobre algo que te apasione. Podrías compartir tus aficiones, mostrar habilidades en las que destacas o contar una historia personal, ya sea un hecho divertido o una experiencia que te haya ayudado a crecer como persona. Al crear contenido en YouTube, trabajas varios aspectos de la comunicación, como el vocabulario, los gestos y la postura ante la cámara. Aunque al principio no te sientas preparado, lo importante es lanzarte, ya que mejorarás con la práctica.
Al abrir un canal de YouTube trabajas varios aspecto de la comunicación como es el vocabulario, gestos y postura ante las cámaras. Independientemente si no estas preparado, la idea es precisamente que te lances con todo y en el proceso iras mejorando.
Ahora lo importante de todo esto chicos, independientemente de la opción que escojan, o si contemplan otras alternativas, practiquen lo que más puedan, empiecen a leer a libros que pueden ser de interés para ustedes e imaginen escenarios en donde estén con otro grupo de personas conversando, o salir a la calle y empezar a conocer gente realmente. Sobre este último punto, si no estamos acostumbrados a acercarnos de forma asertiva a otras personas desconocidas, es recomendable que lo hicieras igual, porque con la misma practica vas ir mejorando y entendiendo el comportamiento de las personas.
Resumiendo
Para cerrar este tema, nuestra calidad de vida depende en gran parte de nuestro conocimiento, actitud y palabras. Este último aspecto engloba a los dos primeros, ya que, una vez que hablamos, las personas se forman una idea de quiénes somos. Ese análisis, consciente o inconsciente, les permite hacer conjeturas sobre nosotros: si somos tímidos o extrovertidos, nuestro nivel de carisma o empatía, e incluso nuestro nivel socioeconómico o el tipo de familia de la que provenimos.
Esto puede sonar controversial, pero si nos preguntamos en qué se fija la gente al conocernos por primera vez, la respuesta suele ser nuestra vestimenta y nuestro lenguaje. Sin embargo, si tuviéramos que elegir qué impresión dejar, claramente sería nuestra forma de hablar, ya que la manera en que nos comunicamos puede marcar la diferencia a la hora de generar una conexión genuina y sincera. El lenguaje y la expresión son claves para que los demás nos perciban como personas que pueden aportar valor a sus vidas.
Y ahora sí, lo último:
El primer filtro siempre será la imagen. Si fallas en esto, aún tienes la oportunidad de mejorar el segundo filtro, que es tu lenguaje. Pero si fallas en tu lenguaje, aunque tu imagen sea buena, la otra persona no recordará nada de ti.